Quiero compartir con vosotros, queridísimos y amados lectores, y a falta de la entrada del sónar que empiezo a sospechar que Maykel Knyft ha abandonado, mi último descubrimiento en lo que se refiere a bares raros. El Kalahari.
El Kalahari es una terraza-restaurante-bar (es imposible decir todo esto junto sin ahogarse o descojonarse) que está en el Centro Comercial La Moraleja Green, en la parte nueva que algún ávido especulador amplió. Tiene así un rollo entre chill-out, jausero de buen rollo, pijipi con titulitis "no he escuchado tu llamada porque lo tenía en silencio que estaba en misa", gafipastero soy el más alternativo-grunge del corte inglés "el año pasado escuchaba Pearl Jam y llevaba el pelo largo", con tumbonas. Las copas están de precio bien siempre que no pidas exquisiteces como el Cacique 500 y diréis: "¡Pos vaya! Otra terraza más. ¿Qué tiene de raro?"
Aquí es donde aparezco yo con mi experimentada visión. Una vez comienzas a fijarte en las hembras que acuden al susodicho sitio sólo puedes decir: "¡Ostia! ¡Qué tetas!" Comienzas a mirar ya descaradamente a todas las hembras de tu alrededor y te das cuenta de que todas, todas, todas las tetas son de goma. Perfectamente colocadas en su sitio, grandes, turgentes y llevadas por mujeres con cara de alegría.
Vamos que si pusieran un detector de silicona a la entrada el cacharro no pararía de pitar con ritmo de: "Pisaaaa! Pisaaaa! Moreeeena! Que un relicario, que un relicaaariooo..." Eso sí en melodía polifónica ya que el bar está bastante bien montado, está regular atendido como casi todas las terrazas, la música está bien y se está muy tranquilito y a gusto.
No quiero despedirme sin antes pedir perdón a aquellos lectores que leyendo esta entrada se hayan sentido ofendidos bien por tener las tetas de goma (mandadme un mail, chaaatis) o por llevar gafas de pasta, ser de la parte ultra electrónicos radicales libres (Ni siquiera conocéis la canción de "Los niños en el parque") y decir ser alternativos (yo sólo describo, no juzgo)
Mientras escribo esto, estoy escuchando: Coti, Julieta Venegas, Paulina Rubio (Y El Fary a los coros y Paco Pil disfrazado de "La Vaca que baila" haciendo de performer) - Nada de esto.
PD: Maykel, gracias por tus aportaciones a esta y futuras entradas.
3 horas y ya estoy pedo. Ahora vas y lo cascas.
Universidad Autónoma. Como todos los jueves, ayer por la tarde cientos de estudiantes aprovecharon el buen tiempo e inundaron el campus en una fiesta 'legal', autorizada por el Rectorado, en la que no faltó la cerveza, la música y algún que otro 'canuto'.
Así titula y subtitula algún pringado de esos que van a clase en la universidad un artículo en donde describe la fiesta en la que yo asistí como camarero enfundado en mi camiseta con título ofensivo e imagen aún más y subtítulo por la parte trasera: "Soy el puto Michael Knight de la Autónoma".
Desde aquí quiero decir que es de las pocas maneras de que la organización se financie para realizar los proyectos. Atrás quedan los motivos por los que se hace la fiesta y lo que se hace con el dinero ganado. Lo importante es decir que somos alcohólicos, que le damos a los 'porritos' y que todo lo autoriza el rectorado.
Hablando de la fiesta y dejando de lado a 'periodistos', estuvo genial y me pillé un pedo como un Ford Fiesta. A ver si es que van a tener razón...
Mientras escribo esto estoy escuchando: Fórmula Abierta - Te quiero más (y a tope con los locomía)
Artista invitado: Café Olé
Me encontraba yo reposando de mi cena familiar un Jueves sin cubata-vips cuando recibí la llamada que iba a cambiar el desarrollo de las horas venideras: ‘Oye, ¿te vienes a una barra libre en Kapital?’ No hace falta que diga cuál fue la respuesta, y en pocos minutos salí presto, previa carrera en un taxi (raro para variar...) que llevaba Radiolé a full volumen y ahora, desde el conocimiento, os haré la recomendación que nunca os fijéis en la letra de las canciones de la copla española.
Tras unos minutos de espera, llegaron Julki y compañía, y tras una pequeña gestión entramos a Kapital con un ‘Buenas noches señores y una copa by the face’ (esto me generó las primeras dudas de que fuera a haber barra libre, como más tarde comprobamos...) Nada más entrar vimos una ristra de famosillos estilo aquí-hay-tomate, como la que pensé en principio que era la puta mora (y no es racismo, sino que es que era mora y puta) que estuvo con Marc Ostarcevic, pero hoy me he enterado que era la que ha sido Miss España el año pasado o por lo menos ha estado cerca (mmm.. ¡que raro! una mora Miss España, el gordo de Navidad lo da un niño moro, aquí hay una trama que habría que investigar…), Lorena van Herde o como se escriba, que es muy guapa pero está muy ceporrilla, Vania Millán… y demás parásitos de la sociedad como Aída de Gran Hermano.
Y ahí me presentaron a la que perfectamente podría ser la mujer de mi vida: la hija del dueño de Kapital, y no sólo de Kapital sino tb (que guapo, niño) del Fabrik y del Radical. Esta simpática mujer nos invito a unas copillas y aprovechando la cobertura nos hicimos socios vip de Kapital, que aún no sabemos bien que ventajas reporta, pero queda bien decirlo.
Tras asistir a una entrega de premios absurda (que hoy he visto en tv en el aquí-hay-tomate) nos fuimos de Kapital en dirección al MOMA, allí no paso nada interesante a reseñar, estaba bastante vacío, eso sí, las pocas mujeres que había son dignas, al menos de ser mencionadas en este relato.
Y para finalizar la noche, ya solos los únicos supervivientes que podéis imaginar, como no, Julki y el que suscribe, nos fuimos al Garamond, al cual logramos entrar sin que nos pidieran los 20 €uritos de otras ocasiones, estaba algo más vacío que en otros días, se nota que después de Navidad hay que ser ya un profesional del jachondeo para seguir saliendo los jueves. Al principio hubo un poco de mal rollo porque no aparecía la botella que Julki pagó unas semanas antes, pero bueno, con mi palabra y buen hacer logré que apareciera, y por arte de magia estaba más llena que el último día, así que en ese aspecto salió bien la cosa.
La noche siguió, y en este momento he de decir: ¡cómo me gusta el Garamond!, es un sitio muy bonito en el cual el roneo está garantizado. Yo había ya fichado a una posible presa, nada más entrar y tras muchas miradas y tonterías al final me decidí a hablarla, pero el tema es que no sabía que decirla, así que me puse a su lado, y directamente le dije, ‘oye que quiero hablar contigo pero no sé qué decirte’, cosa que la debió dejar bastante descolocada, y ya a partir de ahí seguimos hablando, y la verdad que no sabía si la cosa iba bien o mal, cuando de repente me separé un poco de ella, y apareció una vinagreti-housera, que estaba más buena incluso que con la que hablaba, y que se puso a hablar con nosotros de bastante buen rollo y de vacileo (cosa que como sabéis me pierde en las mujeres…) Así que en ese momento deseché el objetivo anterior, y me planteé éste nuevo. Pero bueno después de mucho bla, bla.. la chica era muy maja y muy de las que me gustan (pero la muy cabrona tenía novio, aunque no se yo si eso hubiera importado mucho dada la cara que puso cuando le dije que me iba..) decidí que ya era hora de volver a la realidad, ya que quedaban escasas horas para que el despertador sonara, y partimos para el hogar, y la otra se debió quedar bastante jodida, porque mientras hablaba con ésta se acerco a Julki y le dijo: ‘joder tu amigo no para..’ si vamos, si tú supieras.. Aunque bueno he de reconocer que mas jodido me quede yo, que mucho abarque y al final nada, pero bueno, estuvo bonito.
Y tras abrir la puerta de mi casa y oir un: ‘hijo de verdad, eres un inconsciente’ desde la habitación de mis padres, acabó la noche, pero no las consecuencias. Éste ha sido el primer día que he salido teniendo que trabajar al día siguiente y desde la experiencia, quiero felicitar a todos vosotros amigos que salis jueves teniendo que currar al día siguiente, porque ahora sé que el mérito no es ni parecido. Pero bueno estar en el curro con el cuerpo hecho una mierda, con un sueño que te caes, repitiéndote todo el rato la boca a alcohol, y con ciertas náuseas es una experiencia bonita que todos hemos de vivir alguna vez en la vida.
Y aquí acaba el relato de la noche de ayer, ya que hoy es viernes y son las 11 de la noche y algo habrá que hacer (somos unos perdidos..)