Por si no lo he dicho suficientes veces, los Jueves (apodados por mi como los 'Juebebes') son los días más bonitos e interesantes para salir porque salen los auténticos borrachos profesionales entre los que tengo el honor de encontrarme.
Las aventuras de este Juebebes me llevaron en primera instancia a 'Las copas de Europa', bar que ya ha sido comentado en diversas ocasiones; donde se crearon las grandes grases como: "Malú, ponme un Cola-Cao" o "Por favor, ¿me pone un bollo más café?" Después del pertinente 'tuneo', nuestro viaje nos llevó hasta Bisú (calle Santísima Trinidad esquina Cea Bermúdez); íbamos invitados por una tal Leticia (sin Z; ni P). Nada más llegar tuve que decir la gran frase de: "Mi reino por un chaleco de bailar bien" debido a que en la puerta había unos cochazos tremendos como Ferraris, Porsches y Mercedes (¿Qué pasa? ¿Qué los regalan? ¿Qué yogures toma todo el mundo que yo no los tomo y a mi no me tocan?)
La calificación del garito es la siguiente: Puta mierda. Ya nada más entrar empecé a sospechar. El de la puerta parecía que nos hacía un favor dejándonos entrar. Gracias Leticia, entré por ti y ni siquiera te dije hola, ni te conocí ni creo que nunca te conozca. Entramos y había unos viejunos y luego chatis muy buenorras. De repente me di cuenta de que había demasiada gente. El sitio no era muy grande y había demasiado "Aparento más de lo que soy". De repente vi pasar a una cebra y como no la tuve que intentar cazar. No conseguí mucho porque a los siete milisegundos ya la estaban roneando veintisiete metro-pijo-sexuales.
El momento raro de la noche fué cuando me di cuenta de que había demasiados charcos de orina femenina en una zona. A lo lejos atisbé a Dani del Canto del loco (o gruñido del tarao) y en ese momento pusieron su canción de 'Zapatillas'. Canción que, como estaréis cansado de escuchar, trata de que no le dejan entrar en un garito pijo con zapatillas, lo cual es cuanto menos peculiar. Por cierto llevaba zapatillas. ¿Y qué hace una persona cuando ponen una canción suya en una discoteca? Ya lo explicaron los hombres G en su bonita canción del 'ataque de las chicas cocodrilo'.
Y cuando ya tenía suficiente material para calificar como deleznable el garito en cuestión, que quedaban 6 horas para entrar a trabajar y el precio de nueve euros por una copa decidimos retirarnos; no sin antes hacer una pertinente visita a los baños (los baños de los sitios pijos son sacados de revistas de decoración) el amigo Canapé y yo estábamos aliviándonos cuando entre nosotros apareció Dani también aliviándose y de repente dice: "Aquí hay mucho tonto. Aquí hay mucho bofetón" a sus esbirros que le reían las gracias para que él les deje ir con ellos y así a lo mejor se comen las sobras de los tangas de las golfas. Cuando estábamos saliendo Canapé y yo del baño pasando delante de sus secuaces dice Canapé: "Sí sí muchísimo" a lo cual yo contesté: "Demasiado".
Mientras escribo esto estoy escuchando: Mecano - Aire, Ella baila sola - Ella baila sola y Rosario - Sabor Sabor.
0 copas me tomé anoche:
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