Oliva glup glup, sábado

Artista invitado: Maverick. En la era de las subcontrataciones y ante la incomparecencia de Julkito debido a causas de fuerza mayor, se encarga Maverick de narrar el Sábado.

Continuando por los apasionantes mundos del alcohol, la resaca, la falta de sueño, hambre y sed ocurrió lo siguiente en mi no sabida ni conocida despedida de soltero. Después de que Pero Ya Esta Bien No?, también conocida como Querida vieja de los cojones, se fuera a su guarida y nosotros pudiésemos dormir al menos 3 horas sin oir sus alaridos, me despertó El Hombre Que Se Dedica a Mear Mientras Otros Barren de una cierta manera que parecía mi madre diciéndome venga levanta que no vas a llegar al colegio, pues al parecer habían contratado con los del apartamento una serie de actividades acuáticas de las cuales Julkito no iba a participar porque como dice, el agua no es amigo de los borrachos y lo descubriréis en las líneas siguientes.

Después de varios intentos de levantarme luchando contra mi propia voluntad de quedarme en la cama, me levanté, eso sí pedo, con un enano en la cabeza que había dejado el pico y cogido un percutor para destrozarme la cabeza o al menos eso me parecía a mi y sentía yo. Me conseguí levantar y, tras buscar en mis maletas, ponerme el bañador y dirigirnos a la playa, íbamos todos uniformados: bañador, camiseta, chanclas, toalla y una cara demacrada por los efectos del alcohol. Cual fue mi sorpresa que donde íbamos, al lado había un chiringuito (¡qué raro!) pero no tenían bocadillos y yo no había desayunado, a partir de entonces fue cogiendo más y más fuerza uno de nuestros gritos de guerra “Quiero mi bo-cadillo, quiero mi bo-cadillo” famosa frase del dios HOMER que cogimos prestada para la contienda. Con lo cual lo que mas parecía a un bocadillo era un “funciona” de Pascual, el cual me bebí como un inmigrante bebe agua recién sacado de un cayuco.

Me dirigí a donde estaban los demás atendiendo a las explicaciones magistrales de un lobo de mar que se llamaba “instructor” o al menos eso ponía su camiseta por detrás. No estábamos solos, había un grupo de murcianos, sí murcianos, con nosotros atendiendo a las explicaciones. Nos explicaron que los barcos se mueven igual que se mueven los aviones, en ese momento miré a Iceman y le pregunte ¿Sí? y el asintió, lo cual yo tome como un sí su respuesta, e hizo plantearme mi profesión. Nos explico como giraba un barco, que era babor, estribor, la popa, la proa y esa cosa que se baja llamada orza, quilla y demás, pero le falto un detallito de nada que hacer si un barco da la vuelta, como ya veréis hubiese sido de gran ayuda.

Después de las clases fuimos a un simulador de windsurf, lo que viene siendo una tabla pinchada en el suelo que daba vueltas, seguro que era tecnología de INDRA. Nos enseñaron a aparejar un barco con el que supuestamente íbamos a navegar después (navegar: dicese de salir de un punto, girar a un lado y a otro, y otro lado y conseguir volver al punto inicial.) si hacíamos eso nos dijeron que sabíamos navegar, y yo pensé pues aquí hay muy buenos navegantes porque el viernes íbamos muy pedo girando de un lado a otro y conseguimos volver al apartamento. Ya estaba tranquilo, pues con esta experiencia no nos podía pasar nada en el mar, pero algo ocurrió...

Cuando mi grupo, todos menos Poseidón, también conocido como El Capitán Pescanova, que estaba con la Marimandona y los múrcianos, estábamos intentando meter el barco mas allá de la orilla porque había mucha rompiente (otra palabrita marina), es decir olas, e intentando bajar la famosa orza del barco todo ello capitaneado por La Hija del Bucanero, vimos a lo lejos que el otro barco donde iba Poseidón, la Marimandona y los múrcianos vuelca quedándose bocabajo y con nuestro amigo Poseidón dentro. La Hija del Bucanero nos dice que ya no salíamos y que lleváramos el barco a la orilla mientras se tira en busca de vidas hacia el otro navío. Cuando ya por fin llegamos a la orilla, divisamos a Poseidón cabreado y tirando el chaleco al suelo, con un fuerte golpe en la cabeza. Joder, van 7 personas en el barco y se lesiona el de nuestro grupo, la multitud se agolpa en la playa y la incertidumbre crece. ¿Por qué Poseidón y no la Marimandona? digo yo. Mientras tanto, el barco bocabajo y el mástil roto, intentan llevarlo a puerto La Hija del Bucanero y sus secuaces. Ya todos en tierra y la respiración recuperada nos preocupamos más detenidamente por nuestro compañero de viaje el cual siguió un fin de semana de actividades paralelas, empezando por montar en quad con la cruz roja. Los supervivientes del barco y nosotros nos quedamos en la zona de actividades haciendo piragua, la cual no tenia orza, hasta la hora de comer.

El hambre, la sed y el sueño aparecían en mi cabeza como instintos básicos que son, sin poder controlarlos. Nos fuimos a comer a un buffet Iceman, OyOyOyOyOy, El Hombre Que Se Dedica a Mear Mientras Otros Barren y yo, después de saciar a dos de los instintos nos fuimos a saciar el tercero DORMIR. Después de la siesta nos fuimos a hacer body-board y a preguntar a los secuaces a que hora era la barbacoa y la fiesta hawaiana de la noche. Después de una ducha nos fuimos a cenar y a la famosa fiesta hawaiana (que consistió en una sandia llena de un elixir con tropezones) que como bien dijo OyOyOyOyOy, ¿dónde están las hawaianas?. Parecía que la noche no prometía ya que cenando vi mas de una caries cuando la gente bostezaba, pero se fué animando, ya veréis.

Para empezar nos pusimos unas camisetas que había hecho con mucho amor El Hombre Que Se Preocupa Por Pagar Las Copas Con Tarjeta, en la que la mía tenia una lista de cosas por hacer en la noche de mi despedida. Después del chiringuito regentado por el Bucanero donde nos dieron de cenar nos dirigimos a realizar la ruta de los chiringuitos de la noche anterior, éramos 7 pues Poseidón se quedo dolorido en el apartamento y Julki con él, Julki nos trajo el bebercio al estilo avituallamiento y comenzamos un botellón justo donde la noche anterior nos perseguía la policía por las dunas, ¡qué recuerdos! Yo estaba jodido porque el hipo se incrementó en ese botellón pero la idea de no beber me quebrantaba y decidí olvidarme de mi hipo, cosa bastante difícil ya que es involuntario, imprevisible y ademas ya llevaba 2 dias con él. Ya en el primer chiringuito y con copas por medio, el alcohol fue haciendo su efecto y como no, el hipo crecía y crecía, pero algo maravilloso pasó, como si de un milagro fuese cuando Iceman me ponía la mano en el diafragma se me quitaba el hipo, fue mi salvador toda la noche bueno no toda. Aquí empezamos a cumplir las tareas que tenia escritas detrás de mi camiseta, el hipo me venía y se iba gracias a la acción de Iceman, seguimos bebiendo de chiringuito en chiringuito hasta llegar al ultimo chiringuito de nombre original Oliva-va, era un chiringuito diferente a los demás, era la envidia de los chiringuitos de al menos 30 km a la redonda, tenia estatuas como las de la isla de Papua y un Tío Loco que bailaba desnudo con antorchas de fuego.

El pedo en este chiringuito estaba llegando a su cumbre, la vista ya se estaba perdiendo y el hipo cada vez peor. Tomamos copas sin parar, como estábamos en la playa los zapatos empezaban a mezclarse con la arena, también pudo ayudar a eso el que en una de las veces que fui a mear al mar la ola me llego a los tobillos y tuve que recular mientras el chorrete de mi carnet de padre no paraba de regar, joder dije yo, ya voy pedo, ya no veo y tengo hipo. Con las mismas nos acercamos a la barra y El Hombre Que Se Dedica a Mear Mientras Otros Barren me llama y me dice que me acerque que nos van a poner unos chupitos gratis, ¡gratis! dije yo, eso no se puede desperdiciar. Cuando me veo con dos vasitos de chupito uno rojo y otro de granizado, pues al parecer era absenta una bebida que tan fácil te pone pedo como que te cura las heridas de los grados que lleva, claro eso no ayudo ni a mi hipo (que ya tenia vida propia) ni a mi estado de embriaguez que fue cada vez a más.

Goldfillo y El Hombre Que Se Preocupa Por Pagar Las Copas Con Tarjeta se preocuparon por conocer a gente que me ayudara a completar la lista de la compra que tenia escrita en la espalda, y así fue como acabamos todos pintados por los cuatro costados de Pilot, ya que es lo que llevaba para tachar las tareas, entre otras cosas porque la gente se empeñaba en firmarte, en joderte la ropa y arañarte los brazos con el Pilot de los cojones. Una de las cosas era llamar a mi futura borracho y lo único que me acuerdo es a ClaroQueSiii diciéndome cosas pero mi estado de embriaguez era tal que ya solo podía decir dos frases, “Voy pedo” y “Llevo tres días con hipo” las cuales sólo las podía decir cuando el hipo me dejaba respirar y hablar ya que la mano poderosa de Iceman dejo de tener efecto y el hipo ya tenia vida propia, había mutado ya se le podía llamar por su nombre “Hipo”.

Pues bien después de acabar con el absenta Hipo, yo y los demás nos fuimos por la playa camino al apartamento, Goldfillo tenia hambre de churros y desde 200m antes del puesto le gritaba al Churrero y las risas se apoderaron de mi ya casi en el puesto de los churros cuando veo a El Hombre Que Se Dedica a Mear Mientras Otros Barren mear haciendo honor a su nombre, con la consiguiente cara de hijo-puta que tenia el que barría, debía estar pensando. Ya con nuestros churros y Goldfillo contento nos fuimos a dormir, no sin antes darle las buenas noches a Pero Ya Esta Bien No?, que al parecer no le gustaban los encierros de Sanse.

Bueno esto es lo que he sentido este finde o eso creo, gracias chicos por acompañarme en mi pedo: Julki, El Hombre Que Se Dedica a Mear Mientras Otros Barren, Goldfillo, El Hombre Que Se Preocupa Por Pagar Las Copas Con Tarjeta, Iceman, Poseidón, El Hombre Sueño, OyOyOyOyOy e Hipo; no hubiera sido lo mismo sin vosotros.

Nota de Julki: Goldfillo, ¿qué es un congrio?

Mientras copio y doy formato a este relato, estoy escuchando: Harry Nilson - Everybody's talking.